Jorge Sánchez, graduado en CCAFD en el 2016, se encuentra haciendo malabares para compaginar todos los proyectos que tiene entre manos. Disfruta de una beca de iniciación a la investigación en la USJ, está estudiando un máster propio de Alto Rendimiento en Deportes Colectivos de la Universidad de Barcelona, es profesor en el Grado Superior de Actividades Físicas y Deportivas del CPA Salduie y – por lo que hoy le damos la enhorabuena – hace apenas unos meses le han nombrado Responsable del Área de Condición Física y Deportiva de la cantera del Basket Zaragoza.

 

 

Durante el curso 2014-2015, cuando estaba en tercero, comenzó a colaborar de manera voluntaria con el Basket Zaragoza, observando y aprendiendo de Oliver Gonzalo, preparador físico del primer equipo, que entonces lo era de los equipos de la cantera, y profesor de la USJ. “No tenía experiencia en este deporte, pero me encantó el proyecto que se realizaba con los equipos base del Basket Zaragoza. Vi que se trabajaba con jugadores muy jóvenes en un entorno profesional, pero sin dejar de lado el aspecto formativo. Había mucha seriedad y especialización”, recuerda Jorge. La cantera del Basket Zaragoza cuenta con equipos en las categorías Infantil (13-14 años), cadete (15-16 años) y junior (17-18 años).

Al año siguiente, comenzó de manera oficial su trabajo en el equipo gracias a la realización de prácticas extracurriculares en esta entidad. Al mismo tiempo, consiguió una beca extracurricular de iniciación a la investigación que le permitía investigar observando a los jugadores a pie de pista. Esta experiencia le hizo descubrir que la investigación era otra de sus pasiones y decidió realizar un Máster en Rendimiento físico y deportivo de la Universidad Pablo de Olavide que combinaba la investigación y la aplicación práctica.

El año pasado, su andadura en el Basket Zaragoza continuó y se convirtió en preparador físico de algunos equipos de la cantera. Pero, unos meses después, dio un paso de gigante. “Oliver Gonzalo seguía siendo el coordinador. Pero en enero de este año lo ascendieron al primer equipo y a mí me propusieron ocupar su puesto. Fue una gran sorpresa. Cuando llegué al club pensaba ‘ojalá tener un puesto así’. Y finalmente lo he conseguido”, cuenta el exalumno.

Como coordinador de la preparación física de los equipos de la cantera, las funciones que ahora realiza se podrían dividir en dos grupos. Por un lado, se encarga de la coordinación de la preparación física de los 60 jugadores.

Desde que entran en el club en etapa formativa hasta que salen o pasan al primer equipo, “se les realizan test de condición física acordes a su etapa evolutiva para ver la progresión y rendimiento de cada jugador”, explica Jorge. “En estos test, contamos con la ayuda de la USJ que, gracias a los acuerdos de investigación y prácticas, nos cede instrumentos de la sala de valoración biomecánica”, añade.

Por otra parte, coordina, ayuda y observa la realización de los ejercicios relativos a la preparación física de todos los equipos de la cantera. De manera específica ejecuta los que llevan a cabo en las categorías cadete y junior.

Jorge tiene claro que su futuro dependerá de la estabilidad que necesite en cada momento. “El trabajo del preparador físico es poco estable porque normalmente los contratos son por dos o tres temporadas”, explica. “Sin embargo, te da la oportunidad de viajar con los equipos o trabajar con clubes de otros países. Esto es algo que me gusta ahora, pero entiendo que, si en un futuro quiero estabilidad, no sería la profesión más adecuada”, añade. Es por ello que tiene un segundo plan. “Si dejara la preparación física, me centraría en la docencia e investigación, que puede proporcionarte algo más de equilibrio y, además, son campos donde ya estoy adquiriendo experiencia y formación gracias a mi trabajo como profesor en CPA y la beca de investigación de la USJ”, explica Jorge.

Aunque tiene unos objetivos definidos, el exalumno de la USJ afirma que fue “encontrando el camino” conforme avanzaba en el grado y descubría otras áreas que podían convertirse en futuras salidas laborales. “En general, no se reconoce nuestra labor. Ni yo mismo al comenzar el grado sabía que teníamos tantas opciones”, reconoce. Esta situación, afirma, lleva a que la profesión sufra un gran intrusismo. “Hoy en día parece que cualquiera pueda preparar un plan de entrenamiento o una dieta saludable. Y no es así”, reivindica Jorge. “No es normal que se exija una regulación en la etapa universitaria y luego en el mundo laboral no la haya. En Madrid y Barcelona se están comenzando a dar los primeros pasos para lograrlo, pero todavía queda mucho por conseguir”, concluye.

Jorge dedica la mayor parte de su día a día a enseñar a otros, formarse él mismo, investigar para descubrir nuevas realidades y preparar a deportistas que necesitan su ayuda. Lleva el deporte en la sangre y, ya sea en la preparación física o en la investigación, su futuro seguro que estará ligado a la actividad deportiva.