La Confederación de Empresarios de Aragón (CEOE Aragón) ha celebrado hoy su 40 aniversario con una gala encabezada por SM el Rey. El acto ha girado en torno a la historia, actividad y futuro de la Confederación y, sobre todo, en torno a empresas y empresarios, que son “la principal palanca de creación de riqueza y bienestar de la sociedad”, ha destacado su presidente, Miguel Marzo.
El acto, que ha congregado a cerca de 400 personas en la Sala de la Corona de Aragón, en el Edificio Pignatelli, ha incluido la entrega de los Premios Empresa de Aragón 2022. En esta primera edición, los galardones han recaído en:
- Adriana Galve, propietaria de la librería El reino del revés, de Andorra (Teruel) en la categoría de Autónomo/a
- Levitec Sistemas en la categoría de Pyme
- Grupo San Valero en la categoría de Gran Empresa
- Grupo Arcoíris en la categoría de Contribución al Medio Rural
- Bodegas Aragonesas en la categoría de Proyección de Aragón
- Sphere Group Spain en la categoría de Sostenibilidad Empresarial
El presidente del Grupo San Valero, Pedro Baringo, que ha recogido el premio de manos de Felipe VI, ha agradecido a CEOE Aragón esta distinción y ha señalado que “se trata de un reconocimiento a los 1.200 trabajadores de las cinco entidades que lo componen, continuadores de quienes hace 70 años crearon la primera escuela profesional, origen del actual Grupo San Valero”.
Con estos galardones, CEOE Aragón ha querido reconocer a los distintos tamaños de empresas que representa la Confederación y que forman el tejido productivo autonómico, así como la internacionalización y el compromiso empresarial con el territorio aragonés y su población, y con el desarrollo sostenible.
La gala ha sido inaugurada por el Presidente del Gobierno de Aragón y también ha contado con la intervención del Alcalde de Zaragoza.
Así mismo, ha incluido un homenaje a los ex presidentes de la Confederación, con cinco de ellos presentes en el acto: Javier Ferrer (1982-1991), Javier Aisa (1991-1994), Jesús Morte (2005-2013), Javier Callizo (2013-2019) y Ricardo Mur (2019-2022), que han recibido un recuerdo conmemorativo de manos de los presidentes de CEOE nacional, Antonio Garamendi, y Aragón, Miguel Marzo.
En su intervención, Marzo ha resaltado que “tenemos que poner al empresario en el centro de la sociedad, dándole el valor y reconocimiento que merece”. A esta persona “que en su momento tuvo una idea por la que arriesgó su patrimonio, a la que le aportó sus valores, le dedicó toda su energía y de la que espera obtener un lícito beneficio que posiblemente volverá a invertir para generar crecimiento, a menudo le pagamos con críticas” poco justificadas, ha señalado.
También ha defendido que las empresas “tienen que ganar dinero” y que esto solo es posible “cuidando y respetando a trabajadores y sociedad”. La alternativa es “sencillamente, desaparecer”, ha dicho.
En cuanto a la situación de las empresas aragonesas ante las incertidumbres y dificultades actuales, ha considerado que “gozan de buena salud” con compañías y sectores punteros nacional e internacionalmente. Lo mismo ocurre con Aragón como tierra de atracción de proyectos empresariales, “como se está demostrando en los últimos años”, gracias entre otros factores al clima laboral y de interlocución institucional logrado con el diálogo social.
Felipe VI ha cerrado la gala refiriéndose al “reto de país” al que nos enfrentamos actualmente, “que es a la vez una gran oportunidad para abordar transformaciones urgentes”. Para hacerlo, “necesitamos la colaboración y el compromiso de todos” ha dicho.
También ha tenido palabras de felicitación para CEOE Aragón como para las empresas premiadas, “exponentes de la buena gestión y capacidad de iniciativa de las personas que están detrás, los empresarios, ejemplos de
voluntad, perseverancia y esfuerzo”, valores que “es necesario reconocer públicamente” y “agradecer los efectos positivos que transmiten directamente a la sociedad: creando empleo, creciendo de forma sostenible, preocupándose por el medioambiente y el entorno más próximo, y contribuyendo al bienestar de las familias de Aragón y la sociedad española».
