La USJ acogió ayer la primera sesión de las séptimas Jornadas de Innovación Docente, un espacio de intercambio y aprendizaje sobre educación e innovación al que asistieron profesionales e investigadores de ámbito nacional y se presentaron diferentes proyectos de innovación educativa. Hoy continúan las jornadas en la segunda y última sesión hasta las 14:30 horas.

Con el título Back to basics?, esta edición arrancó con la conferencia inaugural de Ángel Fidalgo, docente de la Universidad Politécnica de Madrid con amplia experiencia en el ámbito de la innovación educativa. Fidalgo comenzó haciendo un repaso de las tecnologías emergentes que han acompañado al modelo educativo desde los años 80. “A pesar de que las tecnologías han cambiado los modelos en los ámbitos sociales, económicos, industriales, etc., no lo han hecho en el ámbito educativo”, afirmó. Buscando el porqué de esta ausencia de cambios, el docente explicó que uno de los fallos que se han ido arrastrando en la innovación educativa ha sido que “se ha puesto la atención en la propia tecnología y no en la misión de esa tecnología” cuando lo importante es saber “para qué vamos a usarla” porque solo de esta manera se conseguirá “tener clara la finalidad por la que innovamos, aunque las tecnologías vayan cambiando”.

Otros de los problemas que ha tenido que hacer frente la innovación educativa según Ángel Fidalgo ha sido el no detectar los problemas de aprendizaje más básicos que lastraban su evolución. “El alumnado pasivo y la falta de conocimientos previos son los dos problemas de raíz a los que debemos aplicar mejoras medibles”, aseguró.

Finalmente, animó a difundir todas las iniciativas que se realicen para que se pueda producir un cambio en el modelo educativo porque “muchas veces las innovaciones se quedan en el ámbito de la asignatura y no se publican ni se dan a conocer”, recordó.

Durante la sesión del medio día de estas Jornadas de Innovación Docente, se presentaron los resultados preliminares de la investigación Learning interculturality from religión, enmarcada dentro del Proyecto LIFE, cuyo objetivo es realizar un análisis de los enfoques de la educación religiosa en los países participantes (Italia, Turquía, Grecia, Bulgaria y España), así como la definición de las necesidades de los centros escolares participantes y otros beneficiarios del Proyecto sobre la pluralidad religiosa en las instituciones docentes.

Así pues, los distintos colegios que participaron en el proyecto presentaron algunas de las conclusiones a las que llegaron tras los meses de trabajo. El colegio El Salvador destacó que en ocasiones los niños “sentían su religión como algo superior a las demás” porque “no habían tenido la oportunidad de conocer otras”, pero, cuando lo hacían, “se mostraban muy predispuestos a descubrir nuevas culturas, ritos, etc.”. El colegio Santo Domingo de Silos hizo hincapié en “lo valioso que es contar con niños de diferentes culturas en las aulas” y afirmó que “lejos de ser un impedimento, es una gran oportunidad”, ya que “los alumnos pueden descubrir otras religiones, costumbres y modos de pensar” contadas en primera persona por compañeros de clase. Por último, el CEIP Valdespartera propuso celebrar jornadas multiculturales en todos los centros, se imparta o no religión, para que los niños puedan conocer “otras culturas y ritos”.

Por la tarde, la docente de la USJ Anxela Soto impartió otra conferencia sobre innovación educativa. Además, durante todo el día, se presentaron distintas comunicaciones de proyectos de innovación docente, muchos de ellos realizados en la Universidad San Jorge con alumnos de diferentes grados y coordinados por profesores de las facultades y escuelas de la USJ, como el proyecto de ApS Descubre tus células, diseñado y desarrollado por estudiantes de Farmacia y Educación en centros de Educación Primaria, y Fragilef: abordaje de la fragilidad en personas mayores institucionalizadas mediante el ejercicio físico, llevado a cabo por estudiantes de Fisioterapia.