Hola a todos:
Hoy os presento la última entrada de blog en el espacio virtual de Learning Space. En esta entrada se recogen dos grandes noticias sobre la “nueva educación” Desescalada. Hacia una nueva realidad educativa y La educación que viene
La crisis del coronavirus ha dejado un escenario totalmente abierto para la educación, lleno de interrogantes y novedades que van enfocadas a la innovación educativa, hacia una digitalización. La nueva educación que se nos plantea requiere de un gran esfuerzo de la comunidad educativa y no se va a realizar de la misma manera que antes: participará de esa denominada “nueva normalidad” pautada por la desescalada.
La desescalada en el ámbito educativo va a tener grandes novedades, las cuales van a ser claves para que “la nueva educación” pueda ser una educación igualitaria e equitativa, siendo las claves o retos el alumno, más profesorado, educación online, distintos horarios, nuevos espacios y el entorno rural. Las claves son: el alumno, más profesorado, educación online, distintos horarios, nuevos espacios, evaluación y educación rural.
Vamos a analizar cada una de esas claves-retos, que se recogen en estos artículos:
– El alumno: pretende ser el protagonista de su propio aprendizaje, pero ¿todos los alumnos pueden tener el acceso a conseguir los recursos para hacer propio su proceso de aprendizaje?
– Más profesorado: la reducción de alumnos en el aula va a requerir de más profesorado ¿el profesorado va a hacer sus clases virtuales para los alumnos que están en sus casas y para los de clase presencial? ¿se va a contratar a estudiantes de últimos cursos como prácticas homologadas?
– Educación online: los alumnos son nativos digitales y se adaptan rápidamente a las nuevas tecnologías y tienen una buena competencia digital. Para los docentes es imprescindible tener un buen desarrollo de la competencia digital, pero ¿qué pasa con la brecha digital?
– Distintos horarios: se plantea que los alumnos vayan a diferentes turnos a clase, divididos por grupos de una ratio de 15 alumnos y aquellos alumnos que hacen una actividad, otro grupo de la misma edad y etapa educativa realiza otra actividad. ¿Cuánto va a afectar ese cambio de rutinas y de interacciones sociales en el desarrollo de los niños y niñas? ¿Y las familias y la conciliación familiar, laboral y personal?
– Nuevos espacios: se va a apostar por utilizar nuevas infraestructuras para conseguir que los colegios no sean el nuevo foco de infección, utilizando pabellones, bibliotecas, etc., como nuevas aulas. Se van a eliminar esos espacios de motivación para el alumno dentro del centro como otras nuevas clases construyendo nuevos centros educativos. ¿Qué pasa con los centros rurales agrupados? ¿Cómo se va a enfocar esos espacios que se eliminan dentro de los nuevos centros educativos?
– Evaluación: por último, se va apostar por una evaluación continua, lo que actualmente ya se “pensaba” que se estaba aplicando, pero que, en muchos casos, se fijaba con aprobar el examen final. Ahora bien, no se va a poder exigir lo que se pedía antes de la pandemia, ahora el proceso de evaluación se va a ver condicionado por el desarrollo de competencias, pero ¿cómo va a poder evaluar el docente al alumno, sin verle, de manera objetiva? ¿cómo va a ser capaz de evaluar determinadas competencias relacionadas con las habilidades sociales y de interacción con los demás alumnos y docentes?
– Educación rural: Aragón es la cuarta comunidad autónoma con más alumnos en España escolarizados en centros rurales agrupados. En un momento en el que internet es el gran protagonista para garantizar que todos los alumnos pueden seguir aprendiendo, pero ¿cómo se va a trabajar en aquellas zonas en las que no se dispone de unas buenas infraestructuras de telecomunicaciones?
Queridos futuros docentes, nos espera un nuevo curso lleno de interrogantes, incertidumbre, novedades y retos valientes. Tenemos que pensar que este futuro es el que se les va a presentar a los recién egresados, a nosotros mismos en nuestros futuros periodos de prácticas y en nuestra vida académica y universitaria.
Tenemos que ver que las experiencias vividas en nuestro aprendizaje durante el confinamiento han servido para aprender y ver, esta oportunidad como un reto para contribuir a la mejora de la educación. Así que, futuros docentes, se nos ha presentado un gran momento para presentar que un cambio para la educación es posible.
Así que, futuros maestros y compañeros de profesión, tengamos en nuestra mente todas las claves de la nueva educación (seguro que surgen algunas que todavía ni se han contemplado), para conseguir que la nueva educación, no sea nueva, si no, sea LA EDUCACIÓN DEL SIGLO XXI.
Andrea Campo, alumna Grado en Ed. Infantil
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